Masa de gyoza

Seguro que al leer el título de la receta habrás pensado ¿por qué hacer la masa de gyoza desde cero, si las venden ya hechas y perfectamente cortadas? Bueno, es cierto, pero hacer algo casero es divertido.

Además, cuando haces todo desde cero, sabes lo que hay en la comida (sin ingredientes impronunciables), puedes seleccionar los mejores ingredientes, y la mejor parte, es una experiencia muy gratificante.

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Puede convertirse en una actividad divertida para hacer gyoza desde cero con tu familia o amigos los fines de semana. La masa casera de gyoza puede consumir mucho tiempo, pero al final es una sensación muy gratificante ver a toda la familia devorando las gyozas que has hecho desde cero, sabiendo que están comiendo algo saludable.

Y aunque es un proceso largo, su elaboración es muy sencilla, sólo necesitas sal, agua, harina y un rodillo.

Además, esta masa también te puede servir para hacer jiaozi, el homólogo chino de las gyoza. La mayor diferencia entre una masa y la otra, es el tamaño y grosor de las obleas. La masa de las jiaozi es generalmente más gruesa y las obleas son más grandes que los gyoza.

Si puedes comprar las obleas de gyoza y quieres ahorrar tiempo, puedes saltarte esta entrada y ver mi receta de Gyoza aquí.

Tiempo de preparación: 1 hora 15 minutos

Tiempo total: 1 hora 45 minutos

Raciones: 38 obleas finas de 8 cm

Ingredientes

  • 240 gramos de harina para todo uso
  • ½ cucharadita de sal
  • 120-150 ml de agua caliente, o más si es necesario
  • Harina de maíz, para enharinar

Elaboración

  1. Pesa y tamiza la harina en un recipiente mediano. Agrega la sal al agua caliente y mézclalo hasta que se disuelva completamente.
  2. Vierte el agua en la harina poco a poco, removiéndolo con una espátula de silicona. Después utiliza las manos para amasar los ingredientes, hasta que formes una bola de masa. Si todavía queda harina sin integrar, añade 1/2 cucharada de agua a la vez hasta que se forme una masa.
  3. Pasa la masa a una superficie de trabajo enharinada y amásala durante 10 minutos. Después de este tiempo, la textura de la masa será mucho más suave.
  4. Corta la masa a la mitad, y dale forma de cilindro largo (de aproximadamente 4 cm de diámetro) a cada mitad. Envuelve cada cilindro con film y déjalo reposar durante 30 minutos.
  5. Espolvorea un poco de harina de maíz sobre la superficie de trabajo, y corta cada cilindro en unas 12 partes (aproximadamente, puede variar dependiendo de la longitud y el ancho del cilindro). No te preocupes si cada trozo de masa tiene un tamaño ligeramente diferente.
  6. Cubre la masa con un paño húmedo en todo momento para evitar que se seque. Haz una bola con cada trocito de masa, y presiona cada bola sobre la superficie de trabajo.
  7. Usando un rodillo, extiende la masa, pero no extiendas (aplanes) el borde superior e inferior, solo el centro. Este es un truco para hacer una bonita forma redonda.
  8. Gira la masa 90 grados y repite el amasado del centro para que se forme un círculo. Si quieres conseguir un círculo perfecto, corta la masa con un cortapastas redondo de 8 cm de diámetro y retira el exceso de masa. Repite este proceso con el resto de trozos de masa.
  9. Cubre los restos con el paño húmedo, más tarde podrás juntar todas las sobras, siempre y cuando aún estén aplastadas y no se hayan secado demasiado. Vuelve a amasar los pedazos y repite el proceso.
  10. Espolvorea cada oblea con harina de maíz y apílalas. Asegúrate de taparlos con un paño húmedo. Una vez que utilices toda la masa, envuélvelos con film y guárdalos en el frigorífico o congelador hasta que los vayas a usar.

Notas

Puedes guardar las obleas de gyoza 3-4 días en el frigorífico y hasta un mes en el congelador. Descongélalos en el frigorífico antes de usarlos.

Dado que las diferentes marcas de harina absorben el agua de forma diferente, ajusta la cantidad de agua si es necesario.

¡Hola, soy Ángela!

Aquí tienes mis aventuras culinarias. Con ingredientes sencillos y frescos, transformándolos en platos elegantes y sabrosos para disfrutar de la cocina cada día.

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