Trufas de cardamomo y chocolate

Estos bocaditos de chocolate aromatizados con cardamomo son perfectos para endulzar un café de sobremesa o como colofón final de una comida. De hecho, me las he encontrado muy a menudo en los bufets de los hoteles en vacaciones, junto a la fuente de chocolate que ahora está muy de moda, y al final no quedaba ni una.

1

Todavía recuerdo cuando hice mis primeras trufas, fue en preescolar con 4 o 5 añitos, teníamos una cocina y de vez en cuando nos enseñaban a hacer alguna cosilla.

No se si me salieron bien o mal pero para mi estaban buenísimas, fíjate que ¡todavía me acuerdo de ellas! Normalmente se suelen hacer de chocolate pero, en esta ocasión le he incorporado una especia: el cardamomo.

El cardamomo es una especia asiática de ligero sabor cítrico que es muy utilizado en la gastronomía india para elaborar postres y arroces o tés. En nuestro país no se utiliza demasiado, pero creo que en ciertos dulces si que aporta un toque diferente.

También podemos emplear diferentes variedades de chocolate, negro al 90% de cacao, al 75%, al 55%, con leche o incluso chocolate blanco.

Así mismo podemos variar la decoración o el rebozado empleando, en vez de cacao en polvo, sprinkles o fideos de chocolate o de colores.

Ingredientes para 25-30 trufas

  • 200g de chocolate de cobertura o fondant
  • 50g de mantequilla
  • 100ml de nata para montar (35% de materia grasa)
  • 5-6 vainas de cardamomo abiertas
  • Cacao puro en polvo para rebozar

Elaboración

  1. Primero infusionamos el cardamomo, para ello, calentamos la nata con las vainas de cardamomo en un cazo. Cuando rompa a hervir, retiramos el cazo enseguida y dejamos que enfríe. Reservamos.
  2. Preparamos un recipiente hondo en el que disponer el cacao para que nos sea más fácil rebozar las trufas. Le dejamos apartado de nuestra mesa de trabajo.
  3. Derretimos la mantequilla y el chocolate en un bol (podemos hacerlo al baño María o en el microondas durante 1 minuto a potencia media) y lo removemos hasta que coja una textura uniforme.
  4. Agregamos la nata colada, libre de impurezas y seguimos removiendo hasta obtener una masa lisa y homogénea.
  5. Introducimos la preparación en el frigorífico durante 15 minutos, el tiempo suficiente para que, a continuación, podamos formar las trufas.
  6. Llega la hora de moldear las trufas, lo haremos con ayuda de dos cucharillas, como los profesionales.
  7. Cada bolita la introducimos en el recipiente con cacao en polvo que teníamos apartado y, con las manos, rebozamos las trufas con el cacao en polvo.
  8. Sacudimos un poco para que caiga el exceso y las metemos en la nevera, separadas unas de otras para que no se peguen, hasta que las vayamos a servir.
  9. Podemos conservar las trufas 7 días refrigeradas en la nevera. También se pueden congelar en un recipiente hermético donde aguantarán unos 3 meses, pero lo ideal sería consumirlas en el momento.

Listo, en solo media horita podemos estar devorando unas riquísimas trufas de chocolate y cardamomo.

Espero que os haya gustado la receta y recordaros que podeis dejar vuestros comentarios, ideas o sugerencias. Se agradecen todas.

¡Hola, soy Ángela!

Aquí tienes mis aventuras culinarias. Con ingredientes sencillos y frescos, transformándolos en platos elegantes y sabrosos para disfrutar de la cocina cada día.

¿Hablamos?

Nuestros favoritos