Aliños para ensaladas
Hacer un aliño casero para ensaladas es casi tan rápido y fácil como abrir el tarro de un aliño comprado, pero con la diferencia de que el sabor de lo casero es muchísimo mejor que el mejor aliño comprado que puedas encontrar.
Pero antes de que os zambulláis en los mejores aliños para ensaladas, os voy a contar cómo aderezar una ensalada sin receta alguna.
La forma más básica de conseguir que una ensalada tenga un sabor realmente bueno, es añadiendo una simple vinagreta. La vinagreta es un aderezo elaborado simplemente con aceite y vinagre, posiblemente el aliño más fácil y rápido que hay.
Hacerla solo lleva 30 segundos, y solo tendrás que recordar una simple fórmula: 1 parte de vinagre x 3 partes de aceite + sal y pimienta al gusto. Fácil ¿verdad?
QUÉ ACEITE UTILIZAR
El aceite de oliva virgen extra nunca falla, pero también puedes elegir un aceite ligero y sin sabor como el aceite de semilla de uva, aceite de colza o aceite de girasol.
Para obtener un sabor diferente, puedes optar por el aceite de nuez o de avellana; y un aceite de sésamo le agregará un exótico sabor asiático. Sólo tienes que utilizar un ligero toque con los aceites de sabor más fuerte.
Ni que decir tiene que el aceite de mayor calidad va a tener el mejor sabor.
QUÉ VINAGRE UTILIZAR
¡Hay tantas variedades de vinagre diferentes! La mayoría de los vinagres de vino hacen una vinagreta ligera y suave. El vinagre de arroz también es una buena opción. El vinagre de manzana le da un buen toque (me gusta usarlo en ensaladas con manzana).
El vinagre balsámico es una opción más atrevida, pero le da un maravilloso sabor dulce y ácido a la mezcla. El vinagre de Jerez también es bueno, pero puede ser atrevido, así que utilízalo con cuidado.
El zumo de limón puede sustituir al vinagre, pero prefiero complementarlo con zumos cítricos ácidos (los zumos de naranja y lima también entran en esta categoría) en lugar de sustituirlo por completo. Generalmente sustituyo la mitad del vinagre por jugo de cítricos.
QUÉ CONDIMENTOS UTILIZAR
Además del aceite y el vinagre, lo único que necesitas para hacer una magnífico aliño es un poco de sal, y pimienta (prefiero la pimienta negra recién molida).
Pero es divertido utilizar otros condimentos para darle un giro de 360 grados a tu ensalada. Aquí tienes algunas ideas para complementar el aliño:
- Hierbas frescas picadas como eneldo, albahaca, perejil, cilantro, menta o tomillo (las hierbas secas también funcionan)
- Ajo picado finamente o jengibre fresco
- Chalotas, cebollas o cebolletas
- Quesos atrevidos como el parmesano, el pecorino romano, el gorgonzola o el feta (rallados o desmenuzados)
- Un poco de rábano picante, o incluso un poco de Sriracha agregan un punto picante.
- La mostaza de Dijon añade sabor y actúa como emulsionante
- El azúcar o la miel ayuda a suavizar la acidez del vinagre, si es necesario, además, la miel también actúa como emulsionante.
Y hablando de emulsiones, al aceite y al vinagre les gusta estar separados. Pero para el aliño los queremos juntos (al menos el tiempo suficiente para que llegue a nuestra ensalada).
Una manera efectiva de mezclarlo (también conocida como "emulsionar") es usar una batidora de mano. Pero creo que complica demasiado el proceso y, seamos honestos, no me gusta limpiar de más.
Así que casi siempre mezclo mi aliño siguiendo estas dos maneras:
- Batirlo en un bol. Añado todos los ingredientes en un bol, y lo mezclo enérgicamente hasta que todos los ingredientes estén juntos. ¡Eso es todo! También se pueden mezclar todos los ingredientes excepto el aceite, e ir vertiéndolo poco a poco en un hilo, lo que puede ayudar con la emulsión.
- Mezclarlo en un tarro. Este es mi método favorito porque es más fácil. Simplemente agrego todos los ingredientes en un frasco, lo cierro, agito durante unos segundos y ¡voila, vinagreta!
Una vez que el aliño esté bien mezclado, sólo tienes que probar y ajustar los condimentos si lo deseas, y ya está listo.
Consejo para probar el aderezo: Para tener una idea más precisa del sabor del aliño de tu ensalada, sumerge una hoja en la vinagreta, retira el exceso y pruébalo.
Si no vas a utilizar el aliño de inmediato, es posible que tengas que agitarlo de nuevo justo antes de servirlo. Pero aquí es donde entra en juego los condimentos que emulsionan.
Tanto la mostaza de Dijon como la miel ayudan a emulsionar el aliño, que lo mantiene unido durante más tiempo. Así que considera la adición de uno o ambos si no quieres que tu aliño se separe.
Conserva tu aliño en un frasco de cristal con tapa hermética en el frigorífico, y atempéralo y mézclalo antes de servir.
¡Y eso es todo!
Habiendo dominado el método clásico y ultra sencillo de aderezar una ensalada, te dejo las recetas de mis aliños favoritos para que tus ensaladas sean siempre diferentes.