Guacamole
Se requieren sólo unos pocos ingredientes para hacer un guacamole casero, pero las proporciones y la técnica son lo que marcan la diferencia entre un guacamole normal y uno excelente.
Sí, se que es más fácil comprar el guacamole de Mercadona, pero esta receta es muy sencilla y solo se tarda 15 minutos en hacerlo. ¡Merece la pena!
No hay nada raro en este guacamole, ni mayonesa, ni crema agria, ni puré de guisantes. Sólo aguacate, cebolla, cilantro, chile jalapeño, lima, sal y un ingrediente especial que leerás a continuación.
Pero antes de darte la receta, te voy a dar unos consejos para hacer el mejor guacamole del mundo.
Cómo hacer guacamole
Elige bien los aguacates. Necesitas aguacates Hass maduros, que es la variedad que se encuentra en cualquier supermercado, con la piel ligeramente rugosa. Busca aguacates que cedan un poco si aprietas la carne, evita los que estén blandos o fibrosos por dentro.
Si tienes que elegir entre aguacates duros o blandos, elige los duros y colócalos en una bolsa de papel con un par de plátanos. El gas de etileno liberado por los plátanos los madurará más rápido, pero es posible que tengas que esperar toda la noche o hasta un par de días para que maduren. Si compras los aguacates con un estado de maduración perfecto, pero no vas a utilizarlos inmediatamente, guárdalos en el frigorífico para retardar su maduración.
La textura es la clave. Para obtener la mejor textura, deja trocitos de guacamole sin triturar, y pica finamente la cebolla, el cilantro y el chile jalapeño. Pon la carne del aguacate en un recipiente y, en lugar de cortarlo en cubitos, tritúralo con un triturador de patatas o un tenedor. Deja de triturar cuando la textura del guacamole todavía está un poco gruesa.
Omite el tomate y el ajo. El tomate es el gran ausente en la receta ¿por qué? Porque los tomates harinosos, acuosos, que no son de temporada, no pueden tener cabida en la receta. Si tienes un magnífico tomate rojo carnoso de temporada, no dudes en picarlo finamente (dejando fuera tanto líquido como sea posible) y añadirlo.
Tampoco incluyo ajo porque su sabor eclipsa al resto de ingredientes, los verdaderos protagonistas del plato.
La cantidad de lima correcta. 3/4 de cucharada de jugo de lima (es decir, un poco más de 2 cucharaditas) por cada aguacate triturado es la proporción perfecta para añadir sabor y prevenir la oxidación del aguacate. Puede que necesites más si los aguacates son particularmente grandes.
Los condimentos adecuados. No seas tacaño con la sal; es increíble lo que otra pizca puede hacer para sacar lo mejor del guacamole. El cilantro es un componente clave en el guacamole, por eso utilizo cilantro fresco picado y también añado 1/4 cucharadita de cilantro molido, que da un toque especial irresistible. Si tanto cilantro es demasiado para ti, omite este último.
Receta de guacamole casero
Aprende a hacer el mejor guacamole con esta receta que siempre resulta perfecta, y es muy fácil de preparar. La receta da alrededor de 2 ½ a 3 tazas de guacamole, dependiendo del tamaño de los aguacates.
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo total: 15 minutos
Raciones: 4 personas
Ingredientes guacamole
- 4 aguacates medianos maduros, cortados por la mitad y sin el hueso
- ½ cebolla blanca finamente picada
- ¼ taza de cilantro fresco finamente picado
- 1 chile jalapeño pequeño, sin semillas, finamente picado
- 3 cucharadas de jugo de lima (aproximadamente 1 y media lima), o más si es necesario
- 1/4 cucharadita de semillas de cilantro molidas
- 1 cucharadita de sal, o más al gusto
- 1 tomate de temporada picado, sin piel y sin semillas (opcional)
Elaboración
- Corta los aguacates por la mitad y utiliza una cuchara para sacar toda la carne. Pon la carne en un recipiente, quitando cualquier zona magullada o de color oscuro.
- Utiliza un tenedor (o un triturador de patatas) para aplastar y triturar el aguacate hasta que alcance la textura que quieras.
- Pica y agrega la cebolla, el cilantro, el chile jalapeño, el jugo de lima, el cilantro molido y la sal. Mézclalo.
- Prueba y agrega más sal si es necesario. Si necesitas potenciar el sabor, agrega un poco más de jugo de limón (si está demasiado ácido, no te preocupes, el sabor se suavizará tras un periodo de reposo).
NOTAS
Este guacamole es perfecto tal como está, pero si tienes un tomate carnoso y delicioso de temporada, pícalo y añádelo con el resto de ingredientes.
Si sobra guacamole, guárdalo en un recipiente de tamaño adecuado a la ración, para reducir el área de superficie y evitar lo máximo posible la oxidación. Como bien sabrás la carne del aguacate se vuelve marrón cuando se expone al aire, por eso, para conservarlo en óptimas condiciones, coloca un trozo generoso o la mitad de una cebolla en la parte superior, y cubre el recipiente con un trozo de film. Las sobras se conservan bien, en el frigorífico, durante unos 3 días.
A la hora de servirlo, simplemente retira la cebolla y quita las zonas que estén de color marrón claro.
La cebolla funciona mejor que poner un trozo de film sobre la superficie del guacamole, o cubrirlo con una película de agua. Y también puedes utilizarla para mantener el aguacate sobrante en buen estado, sólo tienes que colocar la mitad de aguacate en un recipiente con un trozo de cebolla, sellarlo con una tapa y se mantendrá en buen estado durante un par de días. Este truco funciona porque las cebollas contienen azufre, y el azufre evita que la enzima oxidante del aguacate interactúe con el oxígeno.
Una ración (1/3 de taza) de este guacamole tiene 188 calorías; 3,6 gramos de proteínas; 13,4 gramos de hidratos de carbono; y 15,3 gramos de grasas (de las cuales 3 gramos son saturadas).