Bizcocho de naranja y yogur

Seguramente habrás notado mi pasión por el dulce y, en concreto por los bizcochos. Hay miles de combinaciones, y una que me vuelve loca últimamente es la mezcla de naranja y yogur.

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Lo comí en casa de una amiga francesa y enseguida le pedí la receta. Era un bocado esponjoso y sabroso y no se hacía nada pesado. Y por lo visto, es todo un clásico en Francia, ¡incluso se enseña a hacer en la escuela!

No me extraña, pues tiene un sabor realmente delicioso apto para para cualquier ocasión, tanto para tomar como postre, como de merienda o desayuno con el café. Así que desde entonces, este bizcocho de naranja y yogur es un habitual en mi casa.

Utilizo piel y jugo de naranja para darle todo el sabor a naranja posible, y el yogur aporta jugosidad, consiguiendo una miga suave, y con un exterior dorado que me gusta enriquecer con un poco de jugo de naranja y miel, cuando se saca del horno (este paso es opcional, o puedes hacer lo mismo con mermelada).

No te preocupes si no eres un experto repostero, se trata de un dulce muy fácil para iniciarte en este mundo de la cocina dulce, que tanto nos cuesta a cualquiera. Y por supuesto, si no te sale bien a la primera, no te rindas.

Cumpleaños, aniversarios, para invitados o fiestas de todo tipo. Como si lo quieres hacer un domingo cualquiera por darte ese capricho. No te resistirás a este bizcocho de naranja y yogur en ninguna ocasión. ¿Pruebas?

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Tiempo de preparación: 20 minutos

Tiempo de cocción: 50 minutos

Tiempo total: 1 hora y 10 minutos

Raciones: 8 personas

Ingredientes

  • 200 gramos de azúcar
  • ½ naranja, la ralladura y el zumo
  • 1 (125 g) yogur natural
  • 3 huevos L
  • ½ cucharadita de extracto de vainilla
  • 190 gramos de harina
  • ¼ cucharadita de sal
  • 2 cucharaditas (10 g) de levadura en polvo
  • 110 gramos de aceite de girasol
  • 85 gramos de miel

Elaboración

  1. Precalienta el horno a 180 ºC con calor arriba y abajo. Engrasa un molde redondo de 20 cm con un poco de mantequilla y reserva.
  2. En un bol mediano, mezcla el azúcar con la ralladura de naranja y frota con los dedos para que la ralladura libere humedad y el azúcar esté húmedo y grumoso. Incorpora el yogur, los huevos y el extracto de vainilla.
  3. En otro recipiente aparte combina la harina, la sal y la levadura. Añade los ingredientes húmedos y mézclalo. Con una espátula empieza a remover mientras viertes el aceite, hasta que la masa esté lisa y brillante.
  4. Vierte la masa al molde y hornea 50 minutos, hasta que la superficie esté dorada y al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio. Si es necesario, cubre la superficie con un trozo de papel de aluminio para que no se dore demasiado.
  5. Deja que el bizcocho se enfríe sobre una rejilla. Mientras tanto, calienta la miel y el jugo de naranja en una cacerola pequeña.
  6. Cuando el molde esté lo suficientemente frío como para cogerlo sin quemarte, desmolda y pon el bizcocho en un plato. Unta la miel tibia por todas partes con una brocha de pastelería. Puedes comerlo frío o tibio.

NOTAS

Como en todas las recetas, la calidad del producto es esencial para que el resultado final sea bueno. Por eso, te recomiendo utilizar limones y naranjas orgánicas. Además, como estamos usando la ralladura de las frutas, será mejor que no contengan pesticidas.

En cuanto al yogur, te recomiendo el yogur griego. Tiene una textura de lo más cremosa, ideal para hacer que el bizcocho sea más ligero. Lo más importante es que no uses un yogur de sabores.

Si no te gusta la miel, o prefieres otro endulzante, puedes untar el bizcocho con cualquier otra mermelada, o incluso de chocolate. Ve variando hasta encontrar la cobertura que más te guste.

¡Hola, soy Ángela!

Aquí tienes mis aventuras culinarias. Con ingredientes sencillos y frescos, transformándolos en platos elegantes y sabrosos para disfrutar de la cocina cada día.

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