Hummus de remolacha

La receta de hoy es hummus de remolacha (por eso tiene ese color tan bonito), uno de mis aperitivos favoritos porque es muy versátil. Sí, lo puedes utilizar para untar cualquier ingrediente, añadirlo en la ensalada, o como relleno de un sándwich.

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Si te gusta la remolacha, y te gusta el hummus, te encantará este hummus de remolacha. Además es ridículamente fácil de hacer. Una vez que tienes la remolacha asada o cocida, es cuestión de añadirlo todo en un procesador de alimentos o triturarlo con una batidora o robot de cocina, hasta que esté fino.

La remolacha añade un sutil matiz al sabor, y un color sorprendentemente bonito, que convierte este dip en la estrella de cualquier mesa. Es tan suave que es casi como si fuera mantequilla de hummus batida.

Normalmente lo hago una vez a la semana, ya que se conserva bien en el frigorífico durante toda la semana, lo que lo convierte en el snack perfecto para picar entre horas. Si como a mi te entra hambre a media mañana o por la tarde, y te apetece algo dulce, ¡prueba esta receta!

¿Quieres comer vegetales que en realidad no te gustan? Mójalo en este hummus, te encantarán.

El secreto para un hummus cremoso y delicioso, es utilizar garbanzos sin piel. Así es, los garbanzos pelados permiten que el hummus sea mucho más suave ¡no esperes un hummus suave y aterciopelado sin pelarlos!

Otro ingrediente "mágico" es la aquafaba o simplemente el agua en la que se han cocinado los garbanzos, preferiblemente fría y de la nevera, vertida lentamente mientras se trituran los ingredientes. Estos dos sencillos trucos te ayudarán a crear un hummus suave y cremoso.

Tiempo de preparación: 10 minutos

Tiempo total: 10 minutos

Raciones: 6 personas

Ingredientes

  • 1 remolacha pequeña asada o cocida
  • 1 tarro (425 gramos) de garbanzos cocidos, aclarados y escurridos y sin pieles
  • 2 dientes de ajo grandes, picados
  • La piel de un limón grande
  • 2 cucharadas de tahini
  • 60 ml de aceite de oliva virgen extra
  • El jugo de un limón pequeño
  • Una pizca de sal
  • Una pizca de pimienta negra recién molida
  • Semillas de sésamo y perejil picado para decorar

Elaboración

  1. Agrega todos los ingredientes (excepto el aceite de oliva) en el vaso de una batidora eléctrica, o procesador de alimentos, y tritúralos hasta obtener una mezcla suave, sin trocitos.
  2. Mientras estás batiendo, vierte en aceite de oliva en hilo, poco a poco, de manera que se emulsione en la mezcla.
  3. Prueba y ajusta el condimento a tu gusto, agrega más sal, jugo de limón o aquafaba (o agua fría) para ajustar la textura del hummus.
  4. Para servir, coloca el hummus en un bol. Rocíalo con aceite de oliva virgen extra, espolvorea unas semillas de sésamo y perejil picado encima.

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NOTAS

Este hummus se puede conservar en el frigorífico, en un recipiente hermético, hasta por 1 semana.

Para cocinar la remolacha, puedes asarla, cocerla al vapor o hervirla. Para asar la remolacha en el horno, retira el tallo y la mayor parte de la raíz de la remolacha y lávala con agua hasta que esté limpia. Rocíala con un poco de aceite y envuelve la remolacha en papel de aluminio. Asala en el horno a 190ºC durante una hora (dependiendo del tamaño de la remolacha) o hasta que un cuchillo pueda introducirse sin resistencia.
Una vez que la remolacha esté lo suficientemente fría como para manipularla, quita la piel.

El truco para eliminar la piel de los garbanzos fácilmente es volver a cocer los garbanzos en agua con bicarbonato durante 20 minutos más. El bicarbonato ayudará a desprender las pieles.

Una ración de este hummus de remolacha tiene 165 calorías, 12 gramos de grasas, 12 gramos de hidratos de carbono (de los cuales, 1,2 gramos son de azúcar y 2,6 gramos de fibra) y 3,4 gramos de proteínas.

¡Hola, soy Ángela!

Aquí tienes mis aventuras culinarias. Con ingredientes sencillos y frescos, transformándolos en platos elegantes y sabrosos para disfrutar de la cocina cada día.

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