Tarta de natillas

Me encantan las natillas, y además de hacerlas para comerlas solas, las utilizo como relleno de una masa brisa, o lo que es lo mismo, una tarta de natillas. Esta receta nunca me ha fallado y siempre sale una tarta de natillas muy bien equilibrada. Además, adjunto la forma de hacerlo con la Thermomix y de manera tradicional.

Y no se hace así de manera fortuita, los ingredientes, la temperatura y la calidad influyen en el resultado final. Estos son algunos consejos para hacer una tarta de natillas perfecta:

La masa

La tarta de natillas tiene que hacerse con una base de masa quebrada. Se que hay muchos que utilizan hojaldre o masa brisa, pero el hojaldre no proporciona suficiente contraste en la textura con el relleno, y la masa brisa es menos sabrosa.

Si quieres añadirle algún aroma o especia a la masa, mejor añadir nuez moscada para darle más potencia y armonía. Nada de ralladura de limón, pues va a eclipsar el sabor de la natilla.

Los huevos

Es la base de un relleno cremoso, pero no está bien definido si hay que utilizar el huevo entero, solo las yemas, o una mezcla de los dos. Las yemas solas le darán un color más anaranjado y un sabor más intenso, pero las proteínas del huevo darán a la crema una consistencia más firme. 

Una combinación de los dos parece lo más adecuado, pero puedes probar para ver cual te gusta más.

Productos lácteos

En el relleno, surge la duda de si utilizar leche únicamente, nata líquida únicamente, o una mezcla de ambas. Lo tradicional es utilizar leche entera, además de ser menos calórico, no es necesaria la presencia de tanta grasa para poder hacer el relleno. También puede ser buena idea utilizar leche evaporada, una opción intermedia entre la leche y la nata.

Aromas

El relleno se puede aromatizar con varios ingredientes. Hay quién utiliza azafrán para, además, darle un color más intenso. La vainilla y la flor de naranja también son muy utilizadas. Pero a mi me gusta la nuez moscada, una especia dulce que no tiene igual. Tiene un sabor sutil pero que combina a la perfección con el resto de ingredientes sin eclipsarlos.

Temperatura

Como siempre al hacer natillas, una baja temperatura batidas lentamente es lo mejor. Si le aplicamos 200º C, resultará en una textura muy espesa, mientras que rondar los 120º C resultará en una textura sedosa. No es un postre que se pueda hacer rápidamente, ni en la elaboración, ni en la espera, pues hay que dejar que enfríe completamente a temperatura ambiente para lograr el máximo placer al comerlo.  Tiempo de preparación: 15 minutos

Tiempo de cocción: 35 minutos

Tiempo total: 50 minutos

Ingredientes

Para la masa quebrada:

• 2 tazas de harina
• 3 cucharadas de azúcar glas
• 150 gramos de mantequilla fría y cortada en cubos
• 2-3 cucharadas de agua fría

Para el relleno:

• 3 huevos
• 2 cucharadas de extracto de vainilla
• 60 gramos de azúcar glas
• 310 ml de leche entera caliente
• 2 cucharaditas de nuez moscada, para espolvorear por encima

Elaboración

Para hacer la masa quebrada:

1. Engrasa un molde para tartas de 22 cm con mantequilla.
2. Mezcla la harina, el azúcar y la mantequilla fría en un procesador de alimentos y tritúralo hasta que tenga una consistencia parecida al pan rallado. También se puede hacer manualmente mezclándolo con las manos.
3. Lentamente, vierte el agua fría hasta que al mezclarse todo se forme una masa suave. Amasa sobre una superficie ligeramente enharinada y forma una bola que envolverás en film. Introduce la masa en la nevera durante por lo menos media hora.
4. Después del tiempo de reposo, estira la masa sobre una superficie enharinada con ayuda de un rodillo hasta que tenga 3 milímetros de espesor.
5. Cubre la base y las paredes del molde con la masa estirada y recorta el sobrante. Coloca encima una hoja de papel vegetal y añade unas legumbres secas para que hagan de peso y no suba la masa.
6. Introduce la masa en el horno precalentado a 180ºC durante aproximadamente 20 minutos o hasta que esté ligeramente dorada y crujiente. Puedes retirar las legumbres a mitad de cocción para que se cocine por todas partes.

Para hacer el relleno:

1. Una vez que tengas la masa cocida, calienta la leche, pero sin que llegue a hervir.
2. Bate los huevos, el extracto de vainilla y el azúcar en un recipiente, hasta que todos los ingredientes estén integrados.
3. Vierte poco a poco la leche caliente sobre los demás ingredientes y continua batiendo hasta que tenga una consistencia líquida.
4. Con cuidado, vierte el relleno encima de la base, y espolvorea la superficie con la nuez moscada.
5. Introduce la tarta en el horno durante 20 minutos, o hasta que veas que se ha cuajado. Saca la tarta del horno y deja que enfríe completamente en el molde antes de desmoldarlo.

Notas

Esta tarta se puede almacenar en un recipiente hermético en el frigorífico hasta por 4 días.

Tarta de natillas en Thermomix

Para hacer la masa quebrada:

1. Coloca todos los ingredientes en el recipiente de la thermomix y selecciona la velocidad 6 durante 10-15 segundos (o hasta que tenga la consistencia de pan rallado fino).
2. Amasa la masa sobre una superficie ligeramente enharinada, haz una bola y envuélvela en film. Mételo en la nevera durante 30 minutos.
3. Cuando esté lista para usarla, estírala sobre una superficie enharinada con un rodillo hasta que tenga unos 3 mm de grosor. Estírala sobre el molde, cubriendo completamente la base y los lados y recorta el sobrante. Puede ser necesario poner un peso encima para que no se infle.
4. Hornea la masa cuando el horno esté caliente a 180 grados, durante aproximadamente 20 minutos o hasta que esté ligeramente dorada y crujiente. Saca la masa del horno y deja que enfríe sobre una rejilla.

Para hacer el relleno:

1. Vierte la leche en el vaso de la thermomix y selecciona velocidad 1 a una temperatura de 80º C, durante 2 minutos.
2. Incorpora el extracto de vainilla y el azúcar, y bate todo a velocidad 2 durante 15 segundos.
3. Agrega los huevos y bátelo durante 20 segundos.
4. Con cuidado, vierte el relleno sobre la masa horneada y fría y espolvorea la nuez moscada por encima.
5. Hornea la tarta durante 20 minutos o hasta que la superficie esté firme. Sácala del horno y deja que enfríe por completo antes de desmoldarlo.