Rollos de canela (Cinnamon rolls)

Con su apariencia rústica, esta masa con mantequilla y un delicioso relleno de canela es una tentación de origen escandinavo indispensable en cualquier colección de recetas dulces.

Parece ser que estos bollos de canela son originarios de Suecia en la década de 1920, donde se denominan kanelbulle, son tan conocidos que incluso protagonizan una celebración especifica.

1

Sin embargo, se han hecho muy populares en todo el mundo, debido a su rica y suave masa, formada con capas de mantequilla y azúcar con canela (y pasas en algunos casos), que se funden en la boca aportando una sensación de placer indescriptible.

La masa es enrollada, cortada en porciones individuales y horneada. No es complicado prepararlos, aunque hay que dejar que la masa fermente y resistir el maravilloso aroma que sale del horno durante la cocción.

Al sacarlos, estarán crujientes por fuera y blandos por dentro, ideales para tomarlos con una taza de té o café.

Los rollos de canela o cinnamon rolls se pueden preparar en un molde grande de bizcocho, rectangular o redondo, o bien en un molde para muffins de 12 cavidades.

Ingredientes para 12 rollos

Para la masa:

  • 325g de harina blanca de fuerza
  • 55g de mantequilla
  • 2 cucharaditas de levadura seca de acción rápida
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 55g de azúcar
  • 150ml de leche caliente
  • 1 huevo batido

Para el relleno:

  • 60g de mantequilla
  • 85g de azúcar
  • 1 cucharada de canela en polvo

Para la decoración:

  • Azúcar glas

Elaboración

  1. En primer lugar engrasamos el molde.
  2. Ponemos la harina en un bol y la integramos con la mantequilla hasta que la mezcla tenga una textura similar a la miga de pan. Añadimos la levadura, la sal y el azúcar y mezclamos.
  3. Combinamos la leche y la mitad del huevo batido y después incorporamos la mezcla de harina hasta obtener una masa ligera. Amasamos con las manos durante 5 minutos hasta que quede suave y elástica.
  4. Ponemos la masa en un bol engrasado, lo cubrimos con un paño húmedo o film trasparente ligeramente untado con aceite, y lo dejamos en un sitio cálido durante una hora, aproximadamente, hasta que haya doblado su volumen.
  5. Trabajamos la masa sobre una superficie limpia y enharinada para eliminar los restos de aire. Con el rodillo amasamos un rectángulo grande de 0.5 cm de grosor.
  6. Batimos los ingredientes del relleno hasta que la mezcla quede suave, y los ponemos encima del rectángulo de masa.
  7. La enrollamos y la cortamos en 12 rebanadas iguales. Colocamos una rebanada en cada cavidad del molde, lo cubrimos con un paño húmedo o film trasparente ligeramente enharinado y reservamos en un lugar cálido durante 1 hora, hasta que las caracolas doblen su volumen.
  8. Calentamos el horno a 200ºC. Pintamos las caracolas con el resto del huevo batido y las horneamos de 8 a 10 minutos hasta que se doren.
  9. Las dejamos enfriar en el molde durante 5 minutos y luego las trasladamos a una rejilla metálica. Las servimos calientes con el lado de las espirales para arriba, y las espolvoreamos con un poco de azúcar glas tamizado.

Notas

Se pueden encontrar ligeras variantes de los rollos de canela, pues su relleno admite todo tipo de ingredientes como las frutas tanto deshidratadas como frescas. Lo mimos ocurre en cuanto a su decoración, podemos glasear las caracolas de canela para darle más sabor todavía.

¡Hola, soy Ángela!

Aquí tienes mis aventuras culinarias. Con ingredientes sencillos y frescos, transformándolos en platos elegantes y sabrosos para disfrutar de la cocina cada día.

¿Hablamos?

Nuestros favoritos