Tarta de queso Philadelphia sin horno

Una de las recetas que más popularidad tiene es la tarta de queso, también conocida como cheesecake. Como sabéis hay muchas maneras de prepararla, se puede hacer al horno (cuando la receta incluye huevos), fría (sin horno), de chocolate, con frutas, de vainilla… las posibilidades son muchas.

Como ya habia hecho la receta de la tarta de queso horneada, en esta ocasión os presento la receta de la tarta de queso en frío que se elabora con queso cremoso, el Philadelphia de toda la vida.

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Al preparar la tarta sin horno es, si cabe, más sencilla y más rápida de hacer, únicamente hay de dejarla bastante tiempo en la nevera para que se endurezca.

Como cobertura, podéis usar una mermelada normal, del sabor que queráis, normalmente se suele usar de fresa o frutos rojos (frambuesas, arándanos, grosellas…) que es el sabor que mejor combina con el queso. Aunque si queréis hacerla todavía más rica, os recomiendo probar esta riquísima salsa de arándanos casera.

El resultado final es una delicia, tiene una textura muy suave que no empalaga nada y que no resulta pesada. Un festín al que ningún invitado dirá que no.

Las cantidades están pensadas para un molde de 23cm:

Ingredientes

  • 350 gramos de queso Philadelphia (no vale light)
  • 3 hojas de gelatina o 1/2 sobre en polvo
  • 350 gramos de nata para montar
  • 75g de azúcar
  • 150g de galletas (Digestive, María, Chiquilin…)
  • 75g de mantequilla derretida

Para la cobertura:

  • 200g de mermelada de fresa o similar
  • 2 hojas de gelatina
  • Fresas para decorar

Elaboración

  1. Para elaborar la base de la tarta, trituramos las galletas con un molinillo, con un robot de cocina que tenga cuchillas (tipo Thermomix o Mycook), o si no tenemos, las metemos dentro de una bolsa y las machacamos con un rodillo. Necesitamos que queden pulverizadas.
  2. Mezclamos las galletas con la mantequilla derretida y ponemos esta masa en la base de nuestro molde desmontable, alisando con una cuchara la superficie para que quede lisa. Después lo introducimos en el frigorífico mientras hacemos el resto.
  3. Ponemos a remojar las 3 láminas de gelatina en agua fría unos 5 minutos para que ablande.
  4. Ponemos a fuego medio 100g de nata junto con el azúcar y la gelatina escurrida. Removemos todo.
  5. Añadimos el resto de la nata y el queso Philadelphia y lo mezclamos bien hasta que se integre todo. Si veis que todavía os quedan grumos podéis batirlo con la batidora de mano.
  6. Una vez listo, lo añadimos a la base de galletas, procurando que la superficie quede lisa y lo metemos en la nevera 3 horas mínimo para que se solidifique.
  7. Mientras preparamos la cobertura. Remojamos las 2 hojas de gelatina en agua fría.
  8. Calentamos la mermelada en el microondas y añadimos la gelatina. Mezclamos todo hasta que se disuelva.
  9. Añadimos la cobertura a la tarta de queso cuando esta esté solidificada, nunca antes. La cobertura de mermelada tendrá un grosor de 1 o 2 centímetros, para que se note el sabor a fruta pero no eclipse el sabor a queso.
  10. Introducimos otra hora en el frigorífico para que se solidifique la cobertura. Diez minutos antes de servir, sacamos la tarta de queso Philadelphia de la nevera y decoramos con unas fresas en rodajas.

La hemos preparado sin usar el horno y nos ha quedado riquísima.

¡Hola, soy Ángela!

Aquí tienes mis aventuras culinarias. Con ingredientes sencillos y frescos, transformándolos en platos elegantes y sabrosos para disfrutar de la cocina cada día.

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